2024-08-22

Ribera del Duero de nuevo presente en la cena maridaje con chiles en nogada organizada por Wikivinos en Puebla

La tradición señala a la ciudad de Puebla de los Ángeles como la cuna de los chiles en nogada, creados hace poco más de dos siglos por las monjas del convento de Santa Mónica en honor de Agustín de Iturbide, quienes concibieron un platillo que simbolizara los colores del Ejército Trigarante, encabezado por el consumador de la Independencia nacional, y cuya temporada suele abarcar los meses de agosto y septiembre.

Este platillo —que pasó a convertirse en emblemático de la gastronomía mexicana, suele prepararse en innumerables restaurantes de diversas partes del país—, protagonizó el pasado jueves 8 de agosto una espectacular cena maridaje en el restaurante de Casareyna, hotel boutique del centro histórico de la capital poblana, convocada por cuarto año consecutivo, y segundo en la misma sede (antes se realizaba en el restaurante Maizal, de la misma ciudad), por Wikivinos, la principal plataforma digital mexicana enfocada a la difusión y capacitación vinícola, a cargo de su creador, Christian Nolasco.

La popularidad del platillo dispuesto en el restaurante lo avalan los cerca de 40 mil chiles en nogada que suelen servirse a lo largo de cada temporada, todos con el respectivo certificado de autenticidad numerado. Y, también por segundo año consecutivo, Ribera del Duero estuvo presente en tan importante evento, que ahora convocó a poco más de un centenar de invitados.

El patio central de un rehabilitado inmueble con siglos de antigüedad, fue el escenario donde los comensales disfrutaron del platillo estelar del restaurante, acompañado de media docena de bebidas dispuestas para disfrutar sus distintos matices de maridajes: vinos espumoso, naranja, rosado y tinto, mezcal y, por parte de la Denominación de Origen española, un blanco de uva albillo mayor elaborado por la bodega Viña Valera, caracterizado por su tonalidad amarillo pajizo, aromas florales con toques minerales, y una estructurada sensación en boca con ligera acidez.

Curiosamente, hará cosa de una década que se le empezó a prestar importancia al maridaje del platillo, según lo relatara el año pasado Daniel Valdés, el sommelier poblano que condujera entonces la experiencia, que hasta entonces solía acompañarse, al menos en los restaurantes poblanos, con cerveza, tequila y hasta agua de frutas, antes de empezar a hacerlo con vinos rosados, elección que obedecía más a la armonía de su color con los chiles en nogada, que en reparar en las características de la variedad del vino seleccionado.

De ahí la importancia del ejercicio realizado por Wikivinos, al poner a disposición del comensal diversas alternativas de maridaje, para que cada uno valorara la que mejor le acomodara a su paladar para acompañar los delicados sabores generados por la combinación de ingredientes del más barroco platillo de la gastronomía mexicana, con los cuales los vinos de la D.O. Ribera del Duero pueden resultar magníficos acompañantes.