De unos años a la fecha, la cultura del vino en México se ha expandido y reforzado gracias a diversos cursos sobre la materia, dirigidos por igual a aspirantes a sumilleres como amantes del vino a la búsqueda de ampliar sus conocimientos para un mayor disfrute, impartidos por profesionales en la materia —ahora conocidos como “educadores”— encargados de transmitir no solo del caudal de información sobre la materia, sino la pasión que implica apreciar el producto resguardado dentro de una botella.
Una de ellas es Adriana Zazueta, fundadora y directora de ExploraVid, institución encargada en México de impartir los cursos WSET (Wine & Spirit Education Trust), uno de los más prestigiosos del ramos y cuya matriz se encuentra en Londres, Inglaterra, quien hace poco tomó en España el Primer Curso de Ribera del Duero Wine Educator, convocado por el Consejo Regulador de Ribera del Duero, incorporándose desde entonces a las acciones de promoción en nuestro país.
Basado en su experiencia, nos ofrece sus impresiones sobre la importancia del vino español y su percepción entre el cada vez mayor número de cursantes del mundo del vino: “España siempre será uno de los países más importantes del mundo en cuanto a las regiones vitivinícolas, por su producción y tradición; entonces, para nuestros cursos, desde el nivel básico, se habla de este país aunque sea de sus aspectos generales, adquiriendo un peso mayor conforme avanzan sus niveles de conocimiento. En cuanto a la percepción de los alumnos distingo a los que entran al mundo del vino por cuestiones familiares y siempre toman vino español, de donde se dividirán entre los que permanecen fieles a dichos vinos y quienes buscarán conocer otras regiones, aunque, al final, si tuviera que escoger un país con mayor influencia para los consumidores de vinos mexicanos, ese es España”.
Surgiría la duda si dichos consumidores consideran a los vinos españoles como demasiado “tradicionales” o, incluso, anticuados”, a lo que Adriana responde: “No me da la impresión que los ubiquen como vinos ‘anticuados’ sino, más bien, como vinos con tradición y arraigo familiar, su infancia y otros gratos recuerdos; es como un vínculo con sus ancestros, así lo veo. En el contacto que tengo con gente que aprecia mucho el vino no la veo que los considere anticuados… quizás un consumidor joven perciba una etiqueta de Gran Reserva para gente más grande; en ese sentido, considero muy atinado por parte de Ribera del Duero que también tenga etiquetas de Cosecha, las cuales implican vinos ‘de autor’ con una tendencia mucho más moderna y libre, que pueden ir mucho mejor con lo que actualmente busca el mercado de vinos, donde se expresa mucho más la variedad y fruta, con menos barrica”.
No faltan sus impresiones sobre los atractivos que ofrecen los vinos de Ribera del Duero, elaborados con uva tempranillo, maridados con la gastronomía mexicana: “Yo creo que la gran aceptación en nuestro país de los vinos de Ribera del Duero es porque nuestra comida, al ser de tantos sabores e intensidad en el paladar, busca vinos del mismo nivel. Ahí es donde veo a los vinos de Ribera del Duero muy adaptados a nuestra gastronomía y, sobre todo, a nuestro paladar. Si vemos la pinot noir, uva emblemática y elegante de origen francés, resulta que los mexicanos la encontramos sin la potencia de la tempranillo. En cuestión de maridajes, un Ribera del Duero con mucha intensidad, potencias y taninos, maridado con unas buenas carnitas resulta un maridaje espectacular”.
Y ofrece una última reflexión sobre su labor como educadora del tema de vinos: “Para mí, lo más importante es mostrarles a quienes se adentran en el mundo del vino la pasión que existe en las bodegas y gente que los elabora; en el caso de Ribera del Duero, de la tradición familiar, sus viñas viejas con rendimientos tan bajos, la importancia que su Consejo Regulador le otorga a la calidad de sus vinos. A mí me impacta que tengan vinos de más de ocho años con unos hermosos colores rubí intensos, con muchos aromas que van percibiéndose al probarlo, y no se diga de sus sabores. Transmitir eso es el principal trabajo que puede hacerse con alguien que está adentrándose al mundo del vino, para que pueda entender por qué se aprecia tanto una región por la calidad de sus vinos”.
al mundo del vino, para que pueda entender por qué se aprecia tanto una región por la calidad de sus vinos”.