Cillar de Silos es una bodega familiar creada en 1994 y ubicada en la zona más al norte de la Ribera del Duero. Cuenta con 68 hectáreas de viñedos entre los 12 y los 80 años, situados en laderas y arropados por bosques. Una situación que les confiere unas características propias y que junto a la combinación de la experiencia, trabajo y técnica y al hecho de contar con unas bodegas subterráneas de más de 300 años con una humedad y temperaturas naturales constantes, permite obtener unos vinos únicos.

La selección comienza en la propia cepa, respetando el medio ambiente y buscando siempre la calidad de la uva óptima que, ya en bodega, pasa por diferentes procesos, de la mesa de selección al encubado, la maceración en frío o la fermentación. Durante la crianza, los vinos permanecen en barrica de roble francés entre 13 y 18 meses, periodo durante el que se evitan los excesos de madera para mantener su carácter frutal, de forma que con el paso del tiempo, adquieran su personalidad propia.

Cillar de Silos, además cuenta con una bodega subterránea del siglo XVII. Las condiciones naturales de humedad y temperatura (entre 11,5º y 12ºC) son constantes durante todo el año y las idóneas para que los vinos finalicen el proceso de envejecimiento en botella.